Barniz de flúor, protección para los dientes de leche.
Si tu hijo ya tiene dientes, llévalo al dentista para su primera aplicación de barniz de flúor. Este producto ayuda contra la caries al evitar la desmineralización del esmalte dental.
El barniz de flúor se adhiere fuertemente a los dientes permitiendo un contacto prolongado y una liberación lenta de este importante mineral.
Además, no sólo previene la pérdida del esmalte, también remineraliza las lesiones iniciales de caries que generalmente aparecen como manchas blancas en los dientes.
Al contener altas concentraciones de flúor, se ha comprobado que este barniz, aplicado de dos a cuatro veces al año, reduce de manera considerable la caries en niños. Incluso en aquellos con riesgo alto de padecer la infección bucal.
La aplicación del barniz de flúor resulta rápida y sencilla. Su sabor neutro es bien aceptado. Los buenos resultados de este producto dependen en gran medida de un correcto cepillado dental, dos veces al día, por lo menos.
Consulta a tu dentista.
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