El primer cepillo dental eléctrico
Apareció en los anaqueles de los supermercados en 1959 con el nombre de BROXODENT. Fue al primer cepillo dental eléctrico de la historia.
Su inventor, el doctor sueco Philippe-Guy Woo, concluyó el desarrollo del dispositivo en 1952 y años después la farmacéutica norteamericana Bristo-Myers Squibb lo fabricaría en serie para comercializarlo a nivel mundial.
Este cepillo debía permanecer enchufado a la corriente eléctrica durante su uso. No empleaba baterías.
Hoy en día BROXO – su nombre actual – tiene una muy baja participación de mercado frente a dispositivos mejor posicionados, gracias al poder del marketing y la publicidad.
Sin embargo, la marca pionera se defiende. Más de 167 estudios clínicos – afirma- respaldan la eficiencia de BROXO para detener el avance de la gingivitis en sólo 8 días
Fue el primer cepillo dental eléctrico de la historia ¿será también el mejor? No lo podemos afirmar.