¿Tus dientes están enfermos de enojo?
Los dientes reflejan nuestra vitalidad, tensiones diarias y la forma en que enfrentamos los conflictos. Esto, según los expertos en medicina psicosomática.
Sin embargo, el enfoque no es del todo nuevo. La medicina china antigua habla de meridianos –canales de energía- que conectan órganos, dientes y emociones.
En el libro “La enfermedad como camino”, sus autores, Thorwald Dethlefsen y Rüdiger Dahlke, señalan que una dentadura en malas condiciones refleja dificultades para expresar ofuscación.
Una persona poco propensa a manifestar cólera tendería a apretar las mandíbulas frecuentemente como señal de impotencia; una agresión a sus dientes.
Además, cuando experimentamos enojo, la vesícula produce una mayor cantidad de bilis que altera el pH de la saliva y con ello hace a los dientes más vulnerables al ataque de microorganismos.
Otro caso similar sería el bruxismo, un padecimiento muy en boga que daña seriamente la dentadura. Su origen: el estrés.
¿Este contenido te dice algo sobre tus padecimientos dentales y tu forma de ser?