Dietas ancestrales y caries, los estudios de Weston A. Price
Siempre se ha dicho que una correcta higiene oral contribuye a una buena salud bucal.
Como nunca en la historia de la humanidad, millones de personas en todo el mundo se cepillan los dientes al menos dos veces al día.
Sin embargo, la caries va en aumento afectando a niños cada vez más pequeños.
¿Qué está fallando?
El doctor canadiense Weston A. Price (1870-1948) nos ofrece una perspectiva novedosa sobre el origen de esta infección bucal en su libro “Nutrición y degeneración física”.
Esta obra fue el resultado de los viajes de Price por diferentes partes del mundo en los que entró en contacto con culturas indígenas apegadas aún a dietas ancestrales, en Perú, Nueva Zelandia, Alaska, Polinesia, Suiza y Kenia.
Descubrió, por ejemplo, que la mayoría de sus integrantes disfrutaban de un estado de salud óptimo, libre de enfermedades crónicas.
La caries era excepcional; de cerca de 1000 dientes estudiados, sólo uno de ellos la padecía, a pesar incluso de una higiene bucal irregular o nula.
Al estudiar sus hábitos alimentarios concluyó que ninguna cultura indígena ancestral era vegana. En general, consumían 4 veces más calcio y otros minerales en comparación con las dietas modernas. La proporción entre grasa Omega 3 y 6 estaba casi equilibrada.
La boca refleja el estado de salud del cuerpo. La caries es una señal de problemas en el organismo. El paciente debe hacer cambios en su alimentación; el cepillado resultará insuficiente para superar el padecimiento, que suele presentarse por falta de vitaminas A, D y K y de calcio y fósforo.
Quienes viven de acuerdo a las reglas de la naturaleza disfrutarán de una salud plena. Los que las rompen sufrirán sus consecuencias. La caries es una de ellas, apunta Weston A. Price.