Cómo prepararse para un implante dental
Los implantes dentales son prótesis fabricadas en titanio que se anclan al hueso e imitan a la perfección el aspecto y la funcionalidad de los dientes naturales. Este procedimiento se realiza sin complicaciones en más de 97% de los casos.
El éxito de esta avanzada tecnología, depende en gran medida de que el odontólogo tratante y tú, como paciente, sigan el protocolo correcto en su aplicación.
Lo primero es practicar un análisis de sangre para determinar tu estado de salud general. Muchas personas padecen diabetes o hipertensión sin haber sido diagnosticadas. Estos padecimientos llegan a alterar u obstaculizar el desarrollo de la cirugía.
En segundo lugar, se deben descartar infecciones bucales o caries, de lo contrario, el hueso encargado de soportar la nueva estructura puede infectarse.
Posteriormente, la toma de placas determinará si existe o no la necesidad de injertar hueso o si la densidad ósea resulta lo suficientemente fuerte para sostener le implante.
Las radiografías computarizadas (TAC) proporcionan información que ayuda a determinar si los maxilares son idóneos para el procedimiento.
Previo al tratamiento deberás abstenerte de algunos hábitos como beber alcohol, fumar o consumir medicamentos no descritos por el dentista.
Los implantes dentales son tu mejor alternativa para la sustitución de piezas y el procedimiento es seguro e indoloro.