Resinas adhesivas, la gran diferencia en restauraciones
El uso de resinas adhesivas para reemplazar una parte cariada o ausente del diente, fue sin duda una innovación que modificó la percepción de la gente hacia las restauraciones dentales y se la debemos a Michael G. Buonocore (1918-1981), considerado el padre de la odontología adhesiva.
Durante 1955, este médico norteamericano inventó los rellenos blancos de resina. Esta técnica permitió reparar o salvar dientes dañados con excelentes resultados estéticos.
Michael G. Buonocore suponía también que los dientes sanos podían ser sellados con algún tipo de plástico a fin de protegerlos de la acción de las bacterias causantes de la caries. Este material es la resina orgánica de BIS-GMA, utilizada en odontología hasta nuestros días.
Curiosamente, entre el 300 y el 900 d.C., las culturas mayas e incas ya realizaban incrustaciones de piedras preciosas en los dientes, empleando al parecer cementos a base de fosfato de calcio.
El desarrollo de adhesivos y resinas para tratamientos de restauración dental representó un importante reto en la historia de la Odontología.